Me pregunto si algo que piensas tantas veces a lo largo del día se convierte o no en una obsesión. Quizás haya que intentar alejarlo, ignorarlo mientras te ocupas en otras cosas. O quizás simplemente haya que aceptarlo, acostumbrarse y vivir con ello. Como pasa con todas las grandes verdades de la vida.
El marcapáginas del silencio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario